Ingredientes:
1 kg. de patatas.
Aceite de girasol.
Sal.
Salsa brava:
150 ml. de caldo.
25 ml. de aceite de oliva virgen extra.
8 grs. de harina.
1 cucharada de pimentón picante.
2 cucharadas de tomate frito.
Una guindilla de cayena.
Una pizca de sal.
Elaboración:
Partimos las patatas en trozos del tamaño similar a una pelota de tenis. Las cocemos en la olla express durante 10 minutos. Retiramos, pelamos, y cortamos en tamaño más bien grande. Freímos en abundante aceite de girasol caliente. Retiramos del fuego, y le añadimos sal. Bañamos con la salsa brava.
Salsa Brava:
En una sartén ponemos el aceite de oliva virgen extra a calentar junto con la guindilla, a fuego suave, sin que llegue a salir humo. Añadimos el pimentón y removemos; a continuación la harina tamizada, sin dejar de remover. Incorporamos el caldo bien caliente; después añadimos el tomate; y seguimos removiendo hasta que adquiera la consistencia de una crema ligera. Finalmente retiramos la guindilla, y rectificamos el punto de sal.
Precisiones:
Para conseguir unas patatas muy crujientes por fuera y blandas por dentro hay que darles una primera fritura, hasta casi que estén hechas; retirar del fuego; dejar enfriar, y volver a freír.
Esta primera fritura se puede realizar el día anterior.
El caldo se puede hacer con agua y media pastilla para caldo.
1 kg. de patatas.
Aceite de girasol.
Sal.
Salsa brava:
150 ml. de caldo.
25 ml. de aceite de oliva virgen extra.
8 grs. de harina.
1 cucharada de pimentón picante.
2 cucharadas de tomate frito.
Una guindilla de cayena.
Una pizca de sal.
Elaboración:
Partimos las patatas en trozos del tamaño similar a una pelota de tenis. Las cocemos en la olla express durante 10 minutos. Retiramos, pelamos, y cortamos en tamaño más bien grande. Freímos en abundante aceite de girasol caliente. Retiramos del fuego, y le añadimos sal. Bañamos con la salsa brava.
Salsa Brava:
En una sartén ponemos el aceite de oliva virgen extra a calentar junto con la guindilla, a fuego suave, sin que llegue a salir humo. Añadimos el pimentón y removemos; a continuación la harina tamizada, sin dejar de remover. Incorporamos el caldo bien caliente; después añadimos el tomate; y seguimos removiendo hasta que adquiera la consistencia de una crema ligera. Finalmente retiramos la guindilla, y rectificamos el punto de sal.
Precisiones:
Para conseguir unas patatas muy crujientes por fuera y blandas por dentro hay que darles una primera fritura, hasta casi que estén hechas; retirar del fuego; dejar enfriar, y volver a freír.
Esta primera fritura se puede realizar el día anterior.
El caldo se puede hacer con agua y media pastilla para caldo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario